Talarn vive con preocupación el cierre de la Academia de Suboficiales del Ejército de Tierra español, que apura sus últimos días de funcionamiento con las últimas prácticas del curso, que finaliza el 21 de diciembre. Para el próximo año, de momento, el Ministerio de Defensa no ha programado ninguna otra formación.
El municipio vive con preocupación el cierre de esta instalación militar, que está considera da como uno de los motores económicos del Pallars Jussà y emplea a 800 personas entre personal civil y militar.
Cuando se conoció la intención que tenía el Ministerio, el alcalde de la villa pirenaica, Lluís Oliva, ya lamentó que el cierre de esta instalación supondría la pérdida de todos estos puestos de trabajo, 300 directos y 500 indirectos. En este sentido, añadió que hay familias que dependen "exclusivamente" del centro de formación militar.
Por el momento, se desconoce cuál será el futuro del centro; pero el titular de Defensa, Pedro Morenés, ya reconoció en verano que se estaban planteando una racionalización de la enseñanza militar por motivos económicos y advirtió que, a veces, hay que tomar decisiones duras.