El cuerpo de Agentes Rurales (CARO), del Departamento de Medio Ambiente y Vivienda, ha pillado a dos presuntos cazadores furtivos que cazaban conejos y jabalíes en época de veda en un área privada de caza de l'Ametlla de Mar (Baix Ebre). En el momento de la intervención llevaban armas y municiones prohibidas y habían cazado 4 conejos.
Los dos individuos cazaban desde una furgoneta en la cual recurrían los caminos de una gran finca, armados con una escopeta cargada con munición prohibida y una carabina del calibre 22, arma prohibida para practicar la caza, que disponía de una mira telescópica. La caza se efectuaba en el crepúsculo y durante las primeras horas de la noche recurriendo los caminos de esta gran finca privada, al lado mismo de la urbanización de Sant Jordi d'Alfama, aprovechando las luces del vehículo y un foco potente de mano, que también prohíbe la normativa.
Los dos cazadores realizaban esta actividad desde hacía tiempo de manera periódica, hecho comprobado por el seguimiento que habían hecho los agentes del CARO, que finalmente los permitió de pillarlos. De hecho, uno de los cazadores ya fue denunciado el mes de marzo de este año por los agentes rurales después de haber cazado ilegalmente un macho trofeo de cabra salvaje en el Parque Natural dels Ports, hecho que se está instruyendo como presunto delito en el Juzgado de Instrucción número 2 de Tortosa.